Un equipo de la Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica desarrolló un prototipo de nave dirigible doble rígida con capacidad de carga de hasta 500 toneladas, proyecto que les ha permitido obtener patentes y fortalecer sus investigaciones en energía por fusión.
Con la finalidad de optimizar el uso de combustible en traslados aéreos de carga pesada, un grupo de investigadores de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) desarrolló el prototipo de una nave dirigible doble rígida capaz de transportar hasta 500 toneladas.
El proyecto, liderado por el profesor investigador de la Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (FIME), Max Salvador Hernández, ha permitido al equipo obtener tres registros de patente por sus innovaciones en el sistema de lastre de la nave, el diseño de la estructura interna para cámaras de succión y el mecanismo de unión y carga.

De acuerdo con Hernández, diversos países como China, Rusia, Estados Unidos e Inglaterra han apostado por el uso de este tipo de aeronaves para hacer más eficiente el consumo de combustible y trasladar grandes volúmenes de carga a largas distancias.
“Nosotros comenzamos con la idea de desarrollar una plataforma aérea y poder obtener financiación para nuestros proyectos, en los que el núcleo de la investigación es la fusión nuclear”, explicó el investigador.
Aunque el prototipo aún no se encuentra en funcionamiento, el equipo continúa desarrollando modelos con el propósito de obtener recursos para la investigación en energía por fusión, un campo que representa una de las alternativas más prometedoras para el futuro energético.

El proyecto ha sido reconocido con el Premio UANL a la Invención, además de otros premios nacionales e internacionales que avalan su relevancia científica y tecnológica.
Max Salvador Hernández, junto con otros investigadores como Joel González Marroquín, forma parte del Grupo de Investigación en Fusión (GIF), que desde 2010 trabaja en el desarrollo de esta avanzada tecnología.
“Es muy importante obtener este tipo de estímulos, ya que potencian el sentimiento de poder conseguir cosas mayores. El objetivo es obtener recursos que nos ayuden al desarrollo de la investigación en el ámbito de la fusión nuclear”, señaló González Marroquín.
El GIF busca que México logre contar con una instalación operativa dedicada a la energía por fusión, cuyas aplicaciones impactarían en sectores como la energía, la salud, la industria y la protección radiológica.
