En el marco de la semana conmemorativa del Día Internacional de la Mujer, el Colegio de Historia en coordinación con el Centro Universitario de Estudios de Género llevaron a cabo la mesa de trabajo “Universitarias, entre memorias e historias”.
Esta jornada fue un espacio dedicado a la reflexión sobre la trayectoria de académicas que han dejado huella en sus respectivos ámbitos, reconociendo la necesidad de visibilizar su legado.
En el evento, que se realizó en el CEPADIH de la Facultad de Filosofía y Letras, participaron la Dra. Claudia Roxana Domínguez García, la Dra. Luz Verónica Gallegos Cantú y la Mtra. Susana Julieth Acosta Badillo, quienes compartieron sus investigaciones en torno a distintas figuras femeninas cuyas aportaciones han sido históricamente relegadas.
La Mtra. Acosta Badillo presentó su estudio sobre la vida y obra de la Mtra. Julia Garza Almaguer quien se regía por su lema de “Cultura, virtud y trabajo”.
Durante su presentación destacó que las experiencias, historias y aportes de las mujeres docentes, por lo general, quedan ocultos detrás de la institución para la que trabajan; no fue solo una maestra, sino que también desempeñó un papel fundamental en la formación de esta nueva generación de mujeres que no las limitaba simplemente al papel de esposas pues les ofrecía otra opción, en caso de viudez o soltería: la de obreras, brindándoles el conocimiento necesario para que pudieran realizarlo.
Un ejemplo de ello es que durante sus 16 de gestión como directora de la Escuela Industrial Femenil Pablo Livas (ahora Escuela Industrial y Preparatoria Técnica Pablo Livas), impulsó la creación de programas educativos que sentaron las bases para algunas facultades de la Universidad.
Entre estos, el curso de nutriología en 1951 y el curso corto de decoración de interiores en 1952, antecedentes de la Facultad de Salud Pública y Nutrición, y de la especialidad en Diseño de Interiores de la Facultad de Arquitectura, respectivamente.
Al finalizar su presentación, la Mtra. Acosta Badillo enfatizó la necesidad de darles su lugar a las mujeres en la memoria institucional.
“Lo que ven en esta imagen es la plaza de los universitarios ilustres que está a los pies de Rectoría. Habrán notado que los seis personajes son profesores varones, insisto, todos están ahí por méritos propios, pero también consideramos que ya es hora de que se integre una maestra ilustre universitaria”, reflexionó.
Por su parte, la Dra. Gallegos Cantú presentó su investigación “De historia oral, justicia social y estudios de género”, en la que abordó el trabajo de la gestora cultural María Zebadúa Serra, pionera del Colegio de Historia en escribir una tesis sobre la falta de reconocimiento de la acción política de las mujeres en los campos ejidatarios.
Esto le hizo enfrentar algunas dificultades para realizarlo, afirmando que “si el paradigma crítico no incomoda, no es crítico”.
Por último, la Dra. Domínguez García compartió sus avances iniciales sobre el trabajo de la Dra. Rocío González Maíz, primera egresada del Colegio de Historia.
Una investigación que surge de la inquietud de realizar un acercamiento a la historia de las mujeres, el rescate bibliográfico realizado a sus fuentes y las redes que se construyen a partir de ello. Retomando, de esta manera, a las mujeres en la historia y a la historia desde una mirada femenina.
En este sentido, el rescate y la difusión de la trayectoria de académicas como Julia Garza Almaguer, María Zebadúa Serra y Rocío González Maíz no solo permite reconocer el trabajo que realizaron, sino que también abre el camino para la reivindicación de muchas otras mujeres cuyas contribuciones han quedado al margen del relato institucional. Debido a que sin la documentación el borrado histórico de la mujer seguirá vigente.